Un patio a pleno sol. La intensidad de la luz del medio día. El calor de los cuerpos que todavía tienen sabor a frío de invierno. Un grupo de jóvenes y jóvenas que se reúne alrededor de una par de cajas, que según dicen pueden usarse para tomar fotografías. Así la situación del sábado en una casa de la calle 8 de Virreyes, a las 13 hs del día. Una ronda de sillas en el patio, nosotros/as y las ganas de saber y experimentar.
La jornada que nos llevó la tarde, es la tercera de una sucesión de encuentros, que empezaron en el “Comedor los pibes de la 31 Bis” en Retiro y siguieron en Rafael Castillo en un día que combinó fotografía y murales participativos.
La jornada que nos llevó la tarde, es la tercera de una sucesión de encuentros, que empezaron en el “Comedor los pibes de la 31 Bis” en Retiro y siguieron en Rafael Castillo en un día que combinó fotografía y murales participativos.
Estas jornadas se dan en el marco de las acciones que lleva adelante el Área del Cultura del Movimiento Barrios de Pie que a partir de acercar la experiencia creativa de la fotografía estenopeica, permiten reconsiderar el vínculo creado por el mercado con la fotografía. Como dice el fotógrafo estenopeico José “Yuyo” Pereira, posibilitar repensar la “actitud complaciente, cómoda y adormecida” de los consumistas del mercado fotográfico y plantear la “actitud fotográfica”, entendida casi como una resistencia a la invasión tecnológica. (“Estenopeica (es fotografía)”: 2006). Asimismo, esta idea no significa la negación radical a la tecnología, sino una postura crítica ante ella. Y en este sentido la técnica estenopeica, que parte de una cámara obscura con un pequeño orificio por donde pasa la luz (hasta el material sensible –papel o película) posibilita casi instantáneamente las preguntas que las cámaras convencionales disuelven al resolverlo todo o casi todo.
Las preguntas entonces, junto con la sorpresa, y la re-centralización de nosotros/as en el acto fotográfico (y no ya de la cámara) son la constante. Cómo el sábado, en donde a partir de unas cajas y un laboratorio improvisado en el living de la casa, fuimos creadores de nuevas imágenes del barrio (la cancha, la esquina, los amigos/as, etc.) y de nosotros/as mismos.
